Investigaciones de la PGJEM revelan que los secuestradores que operan en la entidad no han incrementado la forma sanguinaria de actuar con sus víctimas, y en la mayoría de los casos, los secuestrados son liberados mediante operativos o al recibir los rescates solicitados.
El procurador de Justicia del Estado de México, Alberto Bazbaz Sacal señaló que en especial este año la agresión no presenta variaciones, a diferencia de los índices de respuesta de la dependencia que de 80 casos denunciados en 2009, 74 fueron esclarecidos.
La forma de operar de la mayoría de estas bandas, es estudiar a sus víctimas por varios días, es decir horarios, lugares a los que acuden, personas que los acompañan, posteriormente los interceptan y los privan de su libertad.
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